En un gesto desinteresado y lleno de amor por la comunidad, un grupo de empleados de Bantrab se unió para llevar alegría a niños de escasos recursos.

Con una gran sonrisa en el rostro y cargados de juguetes, los trabajadores visitaron una comunidad en situación de pobreza, ubicada en la periferia de la ciudad. Allí, se encontraron con decenas de niños que, a pesar de sus difíciles condiciones de vida, transmitían una gran energía y entusiasmo.

Fue entonces cuando los empleados de Bantrab decidieron sorprender a los pequeños y hacerles un regalo: juguetes. Con una entrega organizada y llena de amor, cada niño recibió un obsequio que les arrancó una sonrisa y les hizo olvidar, aunque sea por un momento, las dificultades que enfrentan día a día.

«Como una iniciativa en Bantrab logramos recaudar de parte de nuestros trabajadores más de 2,200 juguetes durante un evento interno, donde de manera voluntaria cada colaborador entrego estos juguetes para ser repartidos a niños de escasos recursos y cuando uno ve estas imágenes es imposible no emocionarse, y pensar que las ideas a veces pueden tener grandes impactos. Solo puedo estar agradecido con cada persona involucrada, por llevar esta alegría”, refirió en sus redes el presidente del Bantrab Herberth Hernández.

“Y queda mucho por ayudar. Debemos ser agradecidos con lo que tenemos», agregó.

La comunidad y los padres de los niños también agradecieron a los trabajadores del banco por su gesto de generosidad y solidaridad.

El acto de altruismo de los empleados de Bantrab no solo trajo felicidad a los niños de la comunidad, sino que también dejó un mensaje de esperanza y generosidad en la sociedad. Con este gesto, se demuestra que todos podemos hacer un cambio positivo en la vida de los demás, sin importar nuestras diferencias.

Bantrab es un banco que se ha destacado por su responsabilidad social y su compromiso con la comunidad guatemalteca. Con iniciativas como esta, demuestran que su compromiso no se limita al ámbito financiero, sino que también están comprometidos con mejorar la calidad de vida de las personas en situación de vulnerabilidad.

Sin duda, este acto de amor y solidaridad de los empleados de Bantrab quedará grabado en la memoria de los niños y sus familias, recordándoles que siempre hay personas dispuestas a ayudar y a brindar una mano amiga en momentos difíciles.

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